/ miércoles 28 de abril de 2021

El drama de la migración

Diez mil 400 veracruzanos fueron deportados de Estados Unidos a tierras jarochas en 2020. En 2019 la cifra llegó a 12 mil repatriaciones.

Los datos, proporcionados por el Director de Atención a Migrantes de la Secretaría de Gobierno, Carlos Enrique Escalante Igual, revelan la política de contención de migrantes en Estados Unidos.

Las deportaciones no han sido voluntarias, ha dicho el funcionario, sino como parte de una estrategia de las autoridades norteamericanas. Los veracruzanos que han emigrado en los últimos años han sido de los municipios de Coatzacoalcos, Tierra Blanca, Córdoba, Orizaba, Xalapa, Misantla, Yecuatla y Martínez de la Torre.

Otro dato: entre los repatriados hay muchos menores de edad. De enero a septiembre de 2020 se registraron 439 casos, 411 de ellos con edades que van de los 12 a los 17 años; y en 28 casos son niños menores de 12.

En 2020, seis veracruzanos —cuatro del puerto de Veracruz, uno de Tlalixcoyan y uno más de San Andrés Tuxtla— regresaron en urnas, víctimas de Covid-19, aunque la cifra de fallecidos por este mal ha sido mayor.

Hace algunos días, la Secretaría de Relaciones Exteriores informó que en los dos primeros meses del 2021, Estados Unidos repatrió a mil 406 veracruzanos que se encontraban en la Unión Americana, convirtiendo a Veracruz en el séptimo lugar nacional con el mayor número de repatriaciones.

La cifra nacional fue de 24 mil 788 repatriaciones de connacionales. De entre ellos, 3 mil 320 eran menores de edad, y 204 eran menores veracruzanos, cuyas edades están entre 12 y 17 años.

Esta política de contención a migrantes también se aplica en territorio mexicano y naturalmente en Veracruz. Así lo ha evidenciado la Secretaría de Seguridad Pública con sus comunicados de “rescates humanitarios”.

Hace apenas unos días, la dependencia estatal informó que rescató a 85 migrantes de Guatemala, Honduras y El Salvador, entre los cuales se encontraban 26 menores, en eventos ocurridos en Agua Dulce, Coatzacoalcos y Las Choapas.

El funcionario dijo que del 16 al 19 de abril, en el marco del Operativo Coordinado Interestatal Veracruz-Tabasco, policías estatales de Veracruz y Tabasco ubicaron a 45 migrantes en el filtro de inspección instalado sobre la carretera federal 180, Coatzacoalcos - Villahermosa.

Y así, una gran cantidad de comunicados se refirieron a estos “rescates humanitarios”.

El 1 de abril pasado, en un comunicado conjunto, los obispos de las diócesis ubicadas en la frontera entre Estados Unidos y México se refirieron al drama que enfrentan los migrantes. “Para la mayoría de ellos, la decisión de migrar no está motivada por la indiferencia hacia su patria o la búsqueda de prosperidad económica; es una cuestión de vida o muerte. La situación es aún más difícil para los niños”, expresaron.

“Desafíos como estos requieren soluciones humanitarias. Sin duda, las naciones tienen derecho a mantener sus fronteras. Esto es vital para su soberanía y su autodeterminación. Al mismo tiempo, todas las naciones comparten la responsabilidad de preservar la vida humana y proporcionar una inmigración segura, ordenada y humana, incluido el derecho de asilo”, indicaron.

Diez mil 400 veracruzanos fueron deportados de Estados Unidos a tierras jarochas en 2020. En 2019 la cifra llegó a 12 mil repatriaciones.

Los datos, proporcionados por el Director de Atención a Migrantes de la Secretaría de Gobierno, Carlos Enrique Escalante Igual, revelan la política de contención de migrantes en Estados Unidos.

Las deportaciones no han sido voluntarias, ha dicho el funcionario, sino como parte de una estrategia de las autoridades norteamericanas. Los veracruzanos que han emigrado en los últimos años han sido de los municipios de Coatzacoalcos, Tierra Blanca, Córdoba, Orizaba, Xalapa, Misantla, Yecuatla y Martínez de la Torre.

Otro dato: entre los repatriados hay muchos menores de edad. De enero a septiembre de 2020 se registraron 439 casos, 411 de ellos con edades que van de los 12 a los 17 años; y en 28 casos son niños menores de 12.

En 2020, seis veracruzanos —cuatro del puerto de Veracruz, uno de Tlalixcoyan y uno más de San Andrés Tuxtla— regresaron en urnas, víctimas de Covid-19, aunque la cifra de fallecidos por este mal ha sido mayor.

Hace algunos días, la Secretaría de Relaciones Exteriores informó que en los dos primeros meses del 2021, Estados Unidos repatrió a mil 406 veracruzanos que se encontraban en la Unión Americana, convirtiendo a Veracruz en el séptimo lugar nacional con el mayor número de repatriaciones.

La cifra nacional fue de 24 mil 788 repatriaciones de connacionales. De entre ellos, 3 mil 320 eran menores de edad, y 204 eran menores veracruzanos, cuyas edades están entre 12 y 17 años.

Esta política de contención a migrantes también se aplica en territorio mexicano y naturalmente en Veracruz. Así lo ha evidenciado la Secretaría de Seguridad Pública con sus comunicados de “rescates humanitarios”.

Hace apenas unos días, la dependencia estatal informó que rescató a 85 migrantes de Guatemala, Honduras y El Salvador, entre los cuales se encontraban 26 menores, en eventos ocurridos en Agua Dulce, Coatzacoalcos y Las Choapas.

El funcionario dijo que del 16 al 19 de abril, en el marco del Operativo Coordinado Interestatal Veracruz-Tabasco, policías estatales de Veracruz y Tabasco ubicaron a 45 migrantes en el filtro de inspección instalado sobre la carretera federal 180, Coatzacoalcos - Villahermosa.

Y así, una gran cantidad de comunicados se refirieron a estos “rescates humanitarios”.

El 1 de abril pasado, en un comunicado conjunto, los obispos de las diócesis ubicadas en la frontera entre Estados Unidos y México se refirieron al drama que enfrentan los migrantes. “Para la mayoría de ellos, la decisión de migrar no está motivada por la indiferencia hacia su patria o la búsqueda de prosperidad económica; es una cuestión de vida o muerte. La situación es aún más difícil para los niños”, expresaron.

“Desafíos como estos requieren soluciones humanitarias. Sin duda, las naciones tienen derecho a mantener sus fronteras. Esto es vital para su soberanía y su autodeterminación. Al mismo tiempo, todas las naciones comparten la responsabilidad de preservar la vida humana y proporcionar una inmigración segura, ordenada y humana, incluido el derecho de asilo”, indicaron.