Me dio gusto escuchar que en este viaje histórico que el presidente Andrés Manuel López Obrador hizo a Cuba, en su discurso ante el presidente Miguel Díaz-Canel Bermúdez, se haya referido a Veracruz y a la cercanía que nuestro estado ha mantenido con la isla. “La migración de Cuba a México se advierte más en la cuenca del Papaloapan, en el estado de Veracruz. La Habana es como el puerto de Veracruz, y lo más parecido al cubano es el jarocho, el habitante de esa región del golfo de México. Por cierto, de allí es mi familia paterna”, expuso el mandatario mexicano.
Visionario, estadista, preocupado por el caminar de todos los países del Continente, el mandatario mexicano también se refirió a la situación que este país vive con la Unión Americana. Por ello, dijo que intervendrá, en el marco del respeto institucional, para hablar con el mandatario norteamericano sobre esta situación.
Por otro lado, definió con mucha claridad: “A título personal, sostengo que yo nunca he apostado, no apuesto ni apostaré al fracaso de la Revolución cubana, a su legado de justicia y a sus lecciones de independencia y dignidad. Yo nunca voy a participar con golpistas que conspiran contra los ideales de igualdad y fraternidad universal”.
Esta gira que lo llevó a Cuba, inició el 5 de mayo con un periplo por Centroamérica, visitando Guatemala, El Salvador, Honduras y Belice. Esto, como parte de su estrategia “Mirar al sur”, con acciones y hechos solidarios, inéditos, que nunca antes un mandatario mexicano había tenido. Se trata, ha dicho, de salir adelante, de sacar a estos países del subdesarrollo y de montarlos en la prosperidad. En cada uno de estos países, el mandatario mexicano lanzó mensajes al gobierno de Estados Unidos.
En Guatemala recibió la Condecoración de la Orden del Quetzal en Grado de Gran Collar. Fue una gira muy productiva, que proyectó, como es natural, el liderazgo del mandatario mexicano en esta región.
La transformación avanza
En tanto, en Veracruz, la transformación avanza y se consolida. Es una revolución de las ideas, de las conciencias, del modus operandi de siempre a un modus vivendi basado en la honestidad, en la integridad, en el trabajo por y para el pueblo.
Hace unos días convivimos con la estructura del Distrito de Coatepec, a quienes les reconozco su entrega, compromiso y apoyo para que la Cuarta Transformación siga su rumbo. Para el movimiento es importante estar cerca de las bases para que este gobierno se consolide y siga su marcha en futuros procesos electorales.
Soy un convencido de que “la suma de voluntades y el intercambio de ideas, son pieza fundamental para continuar con la Transformación de Veracruz y así lo estamos haciendo. En esa misma dinámica el domingo pasado nos reunimos en Emiliano Zapata con compañeros y amigos qué forman parte de la estructura en el Distrito 8. Me siento muy contento con los logros del trabajo que hemos obtenido, haciendo equipo por la transformación de Veracruz.
Detrás de este movimiento está el trabajo, el esfuerzo y las convicciones de muchos ciudadanos que trabajan día a día para que las cosas cambien. Ya lo hemos dicho de muchas maneras: en la política no existe la magia; la sociedad se transforma con la voluntad de los gobernantes y con el trabajo de todos. Así que la consolidación de la transformación en Veracruz pasa por el esfuerzo de todos.
