/ jueves 30 de mayo de 2019

Los primeros seis meses de los gobiernos morenistas

Este viernes 31 de mayo se cumplen los primeros seis meses de gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador y del gobernador de Veracruz, Cuitláhuac García Jiménez; es entonces la fecha precisa para hacer una evaluación de fondo y forma, de cómo se han tomado las riendas del país y del estado; la oportunidad, para ellos, de recomponer el camino ante los escasos resultados alcanzados.

Como diputada federal del Grupo Parlamentario del Partido Revolucionario Institucional (PRI), he apoyado lo que ha sido en beneficio del país, como la creación de la Guardia Nacional como una herramienta eficaz que les permita en un corto plazo combatir los índices delictivos; nos sumamos a las modificaciones en materia educativa para que niñas, niños y jóvenes puedan acceder a educación gratuita y de calidad, así como a una serie de reformas laborales con las que hoy los trabajadores tienen mayor certidumbre.

Hemos sido una oposición responsable y seria, pero también firme, porque hemos alzado la voz ante cada uno de los pasos equivocados, como la crisis por el desabasto de gasolina y todos los efectos negativos que trajo consigo; no hemos permitido el abuso ni la imposición en los nombramientos hechos y ahora, hemos señalado el grave riesgo que se corre con los recortes que hicieron en el sistema nacional de salud, lo que ha puesto en riesgo la vida de millones de mexicanos, solo por citarles unos cuantos ejemplos.

No se trata de enlistar cada uno de los errores que desde el ámbito nacional y estatal han cometido estos nuevos gobiernos de Morena, sino de señalar en lo que se han equivocado para juntos encontrar soluciones. Los tiempos que vive México no pueden dar cabida a la máxima en política de divide y vencerás. No necesitamos seguir levantando un muro entre nosotros; no caben las etiquetas de chairos y fifís, de neoliberales y poseedores de la verdad absoluta, cuando todos somos mexicanos, cuando todos lo que queremos es vivir en un país, en un estado próspero y en paz.

El día en que inicie el segundo semestre de estas nuevas administraciones, el Presidente estará precisamente en nuestra tierra, en Veracruz, para encabezar el acto por el Día de la Marina y para realizar otra gira. Ojalá que ese día haya anuncios importantes para las familias veracruzanas, quienes ansían regresar a esos días en que no sabíamos de múltiples asesinatos, en que no había feminicidios ni las jovencitas desaparecían. Se necesita atender, cuando antes, la salud de los enfermos, reactivar nuestra economía, impulsar la obra pública en cada uno de los municipios.

Estamos conscientes en que aún hay mucho camino por andar, que este es el arranque, pero nos preocupa el que se trabaje sobre las rodillas como ha pasado con el Tren Maya, la refinería de Dos Bocas o el Aeropuerto de Santa Lucía. Nos pone en estado de alerta que la gente esté muriendo en espera de retrovirales y tratamientos para el cáncer o que los inversionistas pierdan la confianza en este país por las volátiles decisiones. Nos duele la sangre que a diario se derrama en Veracruz. Seis meses pueden muchos decir que son insuficientes para hacer una evaluación, pero son el indicador, el síntoma, de que están empezando muy mal.

@AniluIngram

Este viernes 31 de mayo se cumplen los primeros seis meses de gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador y del gobernador de Veracruz, Cuitláhuac García Jiménez; es entonces la fecha precisa para hacer una evaluación de fondo y forma, de cómo se han tomado las riendas del país y del estado; la oportunidad, para ellos, de recomponer el camino ante los escasos resultados alcanzados.

Como diputada federal del Grupo Parlamentario del Partido Revolucionario Institucional (PRI), he apoyado lo que ha sido en beneficio del país, como la creación de la Guardia Nacional como una herramienta eficaz que les permita en un corto plazo combatir los índices delictivos; nos sumamos a las modificaciones en materia educativa para que niñas, niños y jóvenes puedan acceder a educación gratuita y de calidad, así como a una serie de reformas laborales con las que hoy los trabajadores tienen mayor certidumbre.

Hemos sido una oposición responsable y seria, pero también firme, porque hemos alzado la voz ante cada uno de los pasos equivocados, como la crisis por el desabasto de gasolina y todos los efectos negativos que trajo consigo; no hemos permitido el abuso ni la imposición en los nombramientos hechos y ahora, hemos señalado el grave riesgo que se corre con los recortes que hicieron en el sistema nacional de salud, lo que ha puesto en riesgo la vida de millones de mexicanos, solo por citarles unos cuantos ejemplos.

No se trata de enlistar cada uno de los errores que desde el ámbito nacional y estatal han cometido estos nuevos gobiernos de Morena, sino de señalar en lo que se han equivocado para juntos encontrar soluciones. Los tiempos que vive México no pueden dar cabida a la máxima en política de divide y vencerás. No necesitamos seguir levantando un muro entre nosotros; no caben las etiquetas de chairos y fifís, de neoliberales y poseedores de la verdad absoluta, cuando todos somos mexicanos, cuando todos lo que queremos es vivir en un país, en un estado próspero y en paz.

El día en que inicie el segundo semestre de estas nuevas administraciones, el Presidente estará precisamente en nuestra tierra, en Veracruz, para encabezar el acto por el Día de la Marina y para realizar otra gira. Ojalá que ese día haya anuncios importantes para las familias veracruzanas, quienes ansían regresar a esos días en que no sabíamos de múltiples asesinatos, en que no había feminicidios ni las jovencitas desaparecían. Se necesita atender, cuando antes, la salud de los enfermos, reactivar nuestra economía, impulsar la obra pública en cada uno de los municipios.

Estamos conscientes en que aún hay mucho camino por andar, que este es el arranque, pero nos preocupa el que se trabaje sobre las rodillas como ha pasado con el Tren Maya, la refinería de Dos Bocas o el Aeropuerto de Santa Lucía. Nos pone en estado de alerta que la gente esté muriendo en espera de retrovirales y tratamientos para el cáncer o que los inversionistas pierdan la confianza en este país por las volátiles decisiones. Nos duele la sangre que a diario se derrama en Veracruz. Seis meses pueden muchos decir que son insuficientes para hacer una evaluación, pero son el indicador, el síntoma, de que están empezando muy mal.

@AniluIngram