/ domingo 6 de septiembre de 2020

México exige una escrupulosa y fundamentada actuación del TEPJF

El pueblo ejerce su soberanía sin más limitación que la interpretación, contenido y alcance de los derechos consignados en la Constitución federal, las de los estados y la CDMX, sin que pueda contravenirse el pacto federal. Para renovar los poderes Legislativo y Ejecutivo, debe haber elecciones “libres, auténticas y periódicas”, en las que los partidos políticos deben cumplir con el conjunto de normas aplicables a los procesos electorales que en cada caso les corresponden.

Es por lo anterior que los actores políticos pueden acudir ante el Instituto Nacional Electoral (INE) a solicitar el registro de sus organizaciones partidarias, como vía de ejercer los derechos políticos del partido y sus afiliados, para lo cual 10 consejeros y uno más que funge como consejero presidente, deciden, por mayoría de votos, el otorgamiento del registro, su negativa, cancelación, suspensión o inhabilitación para participar en cualquier proceso electoral que tenga como finalidad la elección popular de autoridades.

Se esperaba que el gobierno encabezado por AMLO se mantuviera ajeno a las decisiones del INE y respetuoso de las determinaciones que de ahí emanaran, ya que la autonomía del instituto así lo exige y, por otra parte, el presidente de la 4T enarboló esa bandera desde que ganó la elección para Jefe de Gobierno de la CDMX y cuando perdió (sin reconocerlo) las elecciones presidenciales en 2006 y 2012.

Desde Palenque, Chiapas, con una sonrisa a flor de labios, Andrés Manuel López Obrador grabó un comentario festinando la negativa del INE al registro del fallido partido México Libre, identificado como el proyecto político del matrimonio Calderón-Zavala, pero aunque el expresidente se encuentra políticamente devaluado, la señora Margarita Zavala salió al paso y a voz en cuello expresó: “Sr. Presidente, México Libre lo encabezo yo -no me extraña que usted le quite méritos a las mujeres- y es de más de 250 mil mexicanos que también son pueblo y que debe respetar. (AMLO) Confiesa que presionó al INE, ahora amenaza al Tribunal (TEPJF), con usted pierde la democracia, pierde México”.

Todo lo anterior nos obliga a vigilar y estar atentos al fallo del TEPJF, si es que la determinación del INE se impugna, porque un fallo por recomendación o línea desde Palacio Nacional haría añicos, no a los actores políticos, desde AMLO hacia abajo, sino que destruiría la incipiente democracia mexicana.

El pueblo ejerce su soberanía sin más limitación que la interpretación, contenido y alcance de los derechos consignados en la Constitución federal, las de los estados y la CDMX, sin que pueda contravenirse el pacto federal. Para renovar los poderes Legislativo y Ejecutivo, debe haber elecciones “libres, auténticas y periódicas”, en las que los partidos políticos deben cumplir con el conjunto de normas aplicables a los procesos electorales que en cada caso les corresponden.

Es por lo anterior que los actores políticos pueden acudir ante el Instituto Nacional Electoral (INE) a solicitar el registro de sus organizaciones partidarias, como vía de ejercer los derechos políticos del partido y sus afiliados, para lo cual 10 consejeros y uno más que funge como consejero presidente, deciden, por mayoría de votos, el otorgamiento del registro, su negativa, cancelación, suspensión o inhabilitación para participar en cualquier proceso electoral que tenga como finalidad la elección popular de autoridades.

Se esperaba que el gobierno encabezado por AMLO se mantuviera ajeno a las decisiones del INE y respetuoso de las determinaciones que de ahí emanaran, ya que la autonomía del instituto así lo exige y, por otra parte, el presidente de la 4T enarboló esa bandera desde que ganó la elección para Jefe de Gobierno de la CDMX y cuando perdió (sin reconocerlo) las elecciones presidenciales en 2006 y 2012.

Desde Palenque, Chiapas, con una sonrisa a flor de labios, Andrés Manuel López Obrador grabó un comentario festinando la negativa del INE al registro del fallido partido México Libre, identificado como el proyecto político del matrimonio Calderón-Zavala, pero aunque el expresidente se encuentra políticamente devaluado, la señora Margarita Zavala salió al paso y a voz en cuello expresó: “Sr. Presidente, México Libre lo encabezo yo -no me extraña que usted le quite méritos a las mujeres- y es de más de 250 mil mexicanos que también son pueblo y que debe respetar. (AMLO) Confiesa que presionó al INE, ahora amenaza al Tribunal (TEPJF), con usted pierde la democracia, pierde México”.

Todo lo anterior nos obliga a vigilar y estar atentos al fallo del TEPJF, si es que la determinación del INE se impugna, porque un fallo por recomendación o línea desde Palacio Nacional haría añicos, no a los actores políticos, desde AMLO hacia abajo, sino que destruiría la incipiente democracia mexicana.