/ viernes 31 de julio de 2020

Por la salud de los mexicanos

Atender la salud es una obligación constitucional, aunque en estos tiempos de Covid-19 se vuelve una urgencia mucho más compleja. El pasado miércoles las y los diputados federales tuvimos un tercer periodo extraordinario de sesiones en el que, entre otros puntos, aprobamos la reforma a la Ley de Adquisiciones, con el fin de que el gobierno pueda garantizar el abasto de medicamentos e insumos de salud mediante compras a través de organismos internacionales como la Organización de las Naciones Unidas (ONU) o la Organización Mundial de la Salud (OMS).

En el Grupo Parlamentario del Partido Revolucionario Institucional (GPPRI), del cual soy vicecoordinadora, hemos dado muestra de ser una oposición responsable, por lo que esta sesión no fue la excepción. Así como nos hemos opuesto con firmeza a lo que es perjudicial para el país, también apoyamos siempre lo que es en beneficio de México. Con lo aprobado, se podrá dar respuesta a cientos de miles de enfermos de Covid-19 en todo el país, que esperan recibir su medicamento puntual y completo para cumplir su tratamiento y, a la par, se tratará de reducir la tasa de mortalidad que, desafortunadamente, sigue siendo muy alta.

Como representantes populares no podemos ni debemos negarle a las autoridades más opciones para enfrentar con mayores posibilidades de éxito la pandemia, en tanto los científicos encuentran la cura o vacuna a esta enfermedad que nos azota desde el pasado mes de marzo. Dimos nuestro aval para modificar la ley, pues hay un mecanismo de las licitaciones internacionales, con el que se podrán adquirir suministros de calidad asegurada y a precios bajos y así contribuir a la preservación de la vida de las familias mexicanas.

Ya no se trata de repartir culpas, sobre todo cuando son vidas las que están de por medio. Hoy tenemos que hacer hacerle frente a una enfermedad para la que ningún país estaba preparado y que ha dejado como saldo mundial, hasta ahora, más de 13 millones de enfermos y casi 600 mil muertos, de los cuales más de 45 mil son mexicanos.

Por eso se trata de una reforma oportuna y urgente que permitirá a las autoridades contar con los insumos, medicamentos y vacunas que se necesitan en este momento, aprovechando los fondos internacionales disponibles para este fin y con un candado que combate la corrupción, pues estas adquisiciones deberán efectuarse siempre y cuando exista una investigación de mercado que justifique y asegure las mejores condiciones disponibles.

Nosotros, las y los diputados federales, cumplimos con nuestra parte. Ya no habrá pretextos para que los medicamentos, durante esta larga pandemia, no estén puntuales en todos los hospitales públicos y clínicas de salud, por eso votamos a favor de la reforma, porque es un reclamo social al que se le debe dar respuesta a la brevedad. Como legisladora estaré vigilante de que así sea.

Diputada federal del PRI

@AniluIngram

Atender la salud es una obligación constitucional, aunque en estos tiempos de Covid-19 se vuelve una urgencia mucho más compleja. El pasado miércoles las y los diputados federales tuvimos un tercer periodo extraordinario de sesiones en el que, entre otros puntos, aprobamos la reforma a la Ley de Adquisiciones, con el fin de que el gobierno pueda garantizar el abasto de medicamentos e insumos de salud mediante compras a través de organismos internacionales como la Organización de las Naciones Unidas (ONU) o la Organización Mundial de la Salud (OMS).

En el Grupo Parlamentario del Partido Revolucionario Institucional (GPPRI), del cual soy vicecoordinadora, hemos dado muestra de ser una oposición responsable, por lo que esta sesión no fue la excepción. Así como nos hemos opuesto con firmeza a lo que es perjudicial para el país, también apoyamos siempre lo que es en beneficio de México. Con lo aprobado, se podrá dar respuesta a cientos de miles de enfermos de Covid-19 en todo el país, que esperan recibir su medicamento puntual y completo para cumplir su tratamiento y, a la par, se tratará de reducir la tasa de mortalidad que, desafortunadamente, sigue siendo muy alta.

Como representantes populares no podemos ni debemos negarle a las autoridades más opciones para enfrentar con mayores posibilidades de éxito la pandemia, en tanto los científicos encuentran la cura o vacuna a esta enfermedad que nos azota desde el pasado mes de marzo. Dimos nuestro aval para modificar la ley, pues hay un mecanismo de las licitaciones internacionales, con el que se podrán adquirir suministros de calidad asegurada y a precios bajos y así contribuir a la preservación de la vida de las familias mexicanas.

Ya no se trata de repartir culpas, sobre todo cuando son vidas las que están de por medio. Hoy tenemos que hacer hacerle frente a una enfermedad para la que ningún país estaba preparado y que ha dejado como saldo mundial, hasta ahora, más de 13 millones de enfermos y casi 600 mil muertos, de los cuales más de 45 mil son mexicanos.

Por eso se trata de una reforma oportuna y urgente que permitirá a las autoridades contar con los insumos, medicamentos y vacunas que se necesitan en este momento, aprovechando los fondos internacionales disponibles para este fin y con un candado que combate la corrupción, pues estas adquisiciones deberán efectuarse siempre y cuando exista una investigación de mercado que justifique y asegure las mejores condiciones disponibles.

Nosotros, las y los diputados federales, cumplimos con nuestra parte. Ya no habrá pretextos para que los medicamentos, durante esta larga pandemia, no estén puntuales en todos los hospitales públicos y clínicas de salud, por eso votamos a favor de la reforma, porque es un reclamo social al que se le debe dar respuesta a la brevedad. Como legisladora estaré vigilante de que así sea.

Diputada federal del PRI

@AniluIngram