El próximo domingo 5 de diciembre, la Asociación Política Estatal Alianza Generacional celebrará su 17º encuentro anual en la ciudad de Xalapa.
Casi dos décadas después, las motivaciones que dieron origen a su fundación se muestran cada vez más desafiantes y autoritarias, poniendo en riesgo, como nunca, el futuro de las instituciones de nuestro estado y de la República. A la luz de los pobres resultados de gobierno, pero, sobre todo, del frenesí presidencial por usurpar a las instituciones del Estado y suplantar la constitucionalidad de nuestras leyes –en México, por desgracia, la psicología presidencial sigue determinando el destino nacional, como decía Enrique Krauze–, este encuentro significa una verdadera oportunidad de reconstruir la política y recuperar el gobierno desde una nueva alianza generacional. Debemos volver al origen que dio razón y sentido a nuestra Asociación Política.
Tras la elección del año 2000, cuando el PRI perdió la Presidencia de la República y se dio la primera alternancia política, un nutrido grupo de sus exdirigentes juveniles nacionales y estatales nos organizamos para constituir la organización “Alianza Generacional”, formalizándose en la Ciudad de México ante el notario público Ignacio Morales Lechuga, exprocurador de la República y exembajador de México en Francia, quien será nuestro orador invitado el próximo domingo.
En Veracruz, en mi carácter de exdirigente nacional juvenil de la Juventud Popular Revolucionaria (JPR) y exdirigente estatal del MNJR, tuve el privilegio de formar parte de la Mesa de Coordinación Nacional. Se realizó al menos una decena de reuniones, cuyo lugar común de los participantes era la formación política en las filas de las organizaciones juveniles y estudiantiles, de generaciones comprendidas entre los años 1974-2003, es decir, líderes políticos de casi tres décadas distintas. Así fue como dimos el gran paso en el año 2004 al convocarse en la ciudad de Xalapa a la reunión fundacional de Alianza Generacional en Veracruz, teniendo como primer invitado al entonces gobernador del estado, Miguel Alemán Velasco, siendo tiempos de mucha efervescencia por el desarrollo del proceso electoral rumbo a la gubernatura de Veracruz. ¿Qué buscábamos con esta alianza generacional? Fijar una postura propositiva respecto al contexto estatal, anteponiendo en todo momento la legalidad, la inclusión y la salvaguardia democrática que, más ahora que entonces, se ven amenazadas por la intolerancia y la concentración absoluta del poder.
El 26 de junio de 2015, Alianza Generacional solicitó ante el Instituto Electoral Veracruzano (IEV) obtener su registro como Asociación Política Estatal, para dar institucionalidad a un movimiento que ha crecido para formar parte del mecanismo democrático de Veracruz. Sus 115 mil 54 afiliados, dieron pasos firmes para coadyuvar al desarrollo político y social del estado, al transformar una Alianza Generacional en una alianza con la sociedad veracruzana.
Una alianza que hoy cobra vigencia y asume nuevos derroteros: defender a la democracia y sus instituciones, evitar el avasallamiento de quienes defendemos nuestro derecho a pensar diferente (organismos autónomos, partidos políticos, medios de comunicación, académicos, organizaciones civiles) y ampliar la participación política de los ciudadanos.
Como siempre, esta Alianza Generacional mantendrá abiertas sus puertas a mujeres y jóvenes, profesionistas y empresarios, comerciantes y amas de casa, gente del campo y veracruzanos con vocación del servicio público, que tienen la convicción de estar unidos por el superior interés de contribuir al progreso de Veracruz. Porque nuestra fuerza está en la diversidad y no en la polarización.
Nuestra presencia en el espectro político de Veracruz ha sido siempre para contribuir a la mesura, la tolerancia y el libre ejercicio de la actividad política, sin importar el origen partidista o ideológico. Alianza Generacional ha trascendido a una organización de convivencia plural.
Hoy vivimos tiempos nuevos, inéditos, tiempos de una falsa transformación que sólo representan un salto al vacío del pasado; como hace mucho no sucedía, hoy millones de mexicanos vemos el futuro del país con pesimismo.
Con una pandemia que amenaza con retornar, con una economía que cruje, con un gobierno ineficaz que tolera y alienta la violencia. La historia confirmará que México tendrá en la 4T su peor gobierno en su peor momento.
Para Alianza Generacional, la política es de acuerdos y consensos, por ello basa su actuar en el diálogo, en las propuestas serias y viables y en la construcción de alianzas, sin prejuicios de militancias partidistas, sin exclusión, prevaleciendo el interés por un mejor Veracruz.
Ese es el propósito que hoy nos agrupa, y que convocará en el futuro inmediato, a una renovada gran alianza generacional. Nos vemos el próximo domingo.
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