/ viernes 15 de octubre de 2021

Zenyazen, la SEV y el 2024

Una de las áreas más complicadas del gobierno estatal es la Secretaría de Educación de Veracruz. Históricamente, dicho espacio ha sido ocupado por educadores y políticos; por la SEV pasaron personajes de la talla de Roberto Bravo Garzón, Guillermo Zúñiga Martínez y Juan Maldonado Pereda.

Luego del paso por el cargo de Enrique Pérez, un integrante discreto del equipo de Yunes Linares, el gobernador Cuitláhuac García nombró a uno de sus colaboradores más cercanos, el ex diputado local Zenyazen Escobar. Surgido del magisterio disidente, de la corriente denominada Movimiento Magisterial Popular Veracruzano, Escobar García fue una de las voces más críticas de la reforma educativa impulsada por el gobierno de Peña Nieto. Como diputado local, se le recuerda por ser una de las cabezas visibles del grupo de legisladores que llevó a cabo la toma del Congreso, en agosto de 2018, en protesta por el nombramiento de doce magistrados. Eran los tiempos en que Miguel Ángel Yunes se encontraba a punto de terminar su bienio. Con el nuevo gobierno instalado en Veracruz, Zenyazen Escobar fue nombrado titular de la Secretaría de Educación, que es la que mayor presupuesto ejerce, y la más importante desde el punto de vista del impacto social. Contra todo pronóstico, este maestro de Río Blanco, zona centro de Veracruz, ha llevado las riendas de la SEV sin demasiados sobresaltos; en esta primera mitad del actual gobierno estatal, la dependencia no ha estado exenta de alguna manifestación de maestros o padres de familia, pero en general nada extraordinario. El sector educativo de Veracruz, uno de los más grandes del país, camina sin mayores problemas; la pandemia representó el reto del cierre de escuelas y de la educación a distancia; y el regreso a clases ha sido ordenado y sin contagios masivos de maestros o estudiantes. En el tiempo de la pandemia, la SEV ha denunciado los robos y actos vandálicos que afectaron a los planteles educativos; y desde la dependencia se ha trabajado en generar las condiciones necesarias para la recuperación pronta. Posteriormente, la Secretaría logró enfrentar los daños provocados por el huracán Grace; el meteoro afectó escuelas en Xalapa y la zona norte de Veracruz y desde la SEV se trabajó para que las instituciones educativas estuvieran en condiciones de forma rápida. En términos generales, el trabajo de Zenyazen Escobar al frente del sector educativo de la entidad ha sido discreto pero a la vez eficiente. Por ello, no deja de ser considerado como una de las cartas de su partido rumbo a 2024, aunque él mismo ha declarado de forma reciente que su prioridad “es seguir trabajando por la educación” y que “no son tiempos para hablar de aspiraciones políticas”. Hoy, los reflectores mediáticos apuntan a la secretaria de Energía del Gobierno Federal, Rocío Nahle; sin embargo, Zenyazen Escobar se encamina a consolidar su presencia en una entidad que tiene más de 23 mil escuelas, cerca de 140 mil docentes y casi 2 millones 200 mil alumnos. Precisamente por ese peso; por su cercanía al gobernador Cuitláhuac García; y por los nexos que ha logrado construir en el Altiplano, no se le puede dejar de ver en el contexto de la sucesión de 2024.

Una de las áreas más complicadas del gobierno estatal es la Secretaría de Educación de Veracruz. Históricamente, dicho espacio ha sido ocupado por educadores y políticos; por la SEV pasaron personajes de la talla de Roberto Bravo Garzón, Guillermo Zúñiga Martínez y Juan Maldonado Pereda.

Luego del paso por el cargo de Enrique Pérez, un integrante discreto del equipo de Yunes Linares, el gobernador Cuitláhuac García nombró a uno de sus colaboradores más cercanos, el ex diputado local Zenyazen Escobar. Surgido del magisterio disidente, de la corriente denominada Movimiento Magisterial Popular Veracruzano, Escobar García fue una de las voces más críticas de la reforma educativa impulsada por el gobierno de Peña Nieto. Como diputado local, se le recuerda por ser una de las cabezas visibles del grupo de legisladores que llevó a cabo la toma del Congreso, en agosto de 2018, en protesta por el nombramiento de doce magistrados. Eran los tiempos en que Miguel Ángel Yunes se encontraba a punto de terminar su bienio. Con el nuevo gobierno instalado en Veracruz, Zenyazen Escobar fue nombrado titular de la Secretaría de Educación, que es la que mayor presupuesto ejerce, y la más importante desde el punto de vista del impacto social. Contra todo pronóstico, este maestro de Río Blanco, zona centro de Veracruz, ha llevado las riendas de la SEV sin demasiados sobresaltos; en esta primera mitad del actual gobierno estatal, la dependencia no ha estado exenta de alguna manifestación de maestros o padres de familia, pero en general nada extraordinario. El sector educativo de Veracruz, uno de los más grandes del país, camina sin mayores problemas; la pandemia representó el reto del cierre de escuelas y de la educación a distancia; y el regreso a clases ha sido ordenado y sin contagios masivos de maestros o estudiantes. En el tiempo de la pandemia, la SEV ha denunciado los robos y actos vandálicos que afectaron a los planteles educativos; y desde la dependencia se ha trabajado en generar las condiciones necesarias para la recuperación pronta. Posteriormente, la Secretaría logró enfrentar los daños provocados por el huracán Grace; el meteoro afectó escuelas en Xalapa y la zona norte de Veracruz y desde la SEV se trabajó para que las instituciones educativas estuvieran en condiciones de forma rápida. En términos generales, el trabajo de Zenyazen Escobar al frente del sector educativo de la entidad ha sido discreto pero a la vez eficiente. Por ello, no deja de ser considerado como una de las cartas de su partido rumbo a 2024, aunque él mismo ha declarado de forma reciente que su prioridad “es seguir trabajando por la educación” y que “no son tiempos para hablar de aspiraciones políticas”. Hoy, los reflectores mediáticos apuntan a la secretaria de Energía del Gobierno Federal, Rocío Nahle; sin embargo, Zenyazen Escobar se encamina a consolidar su presencia en una entidad que tiene más de 23 mil escuelas, cerca de 140 mil docentes y casi 2 millones 200 mil alumnos. Precisamente por ese peso; por su cercanía al gobernador Cuitláhuac García; y por los nexos que ha logrado construir en el Altiplano, no se le puede dejar de ver en el contexto de la sucesión de 2024.