Orizaba, Ver.- Con aprobación o sin aprobación, la mujer que vea el aborto como algo necesario para ella, va a recurrir a la interrupción de su embarazo y lo seguirá haciendo, incluso, en las peores condiciones, aseveró Jairo Guarneros Sosa, representante del Colectivo Feminista Cihuatlahtolli.
Tras conocer que la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) rechazó el proyecto que permitiría ampliar los momentos en que el aborto sería legal en el estado, dijo que eso es lamentable, pues se seguirá lamentando el incremento de muertes maternas por interrupción del embarazo.
Refirió que cuando una mujer toma esa decisión, al final, ni las amenazas por parte de la Iglesia de condenarlas va a impedir que lo lleven a cabo, pues es su último recurso.
“No es porque se le ocurrió abortar, lo va a hacer porque el método anticonceptivo falló, porque fue víctima de un abuso sexual; tenemos que separar el ejercicio de la sexualidad y el de la reproducción, porque no tienen obligatoriamente por qué ir juntos y, si dentro de su proyecto de vida no estaba tener un hijo, va a tomar esa decisión”, dijo.
Agregó que las expertas jurídicas que impulsaron desde las organizaciones civiles esta iniciativa tendrán que insistir pues continuarán su lucha porque se respete ese derecho que dice tienen las mujeres.
Guarneros Sosa señaló que el aborto sí es constante, si no todos en la práctica, sí en el pensamiento de las mujeres y principalmente en quienes son violentadas cuando finalmente la maternidad es obligada.
“Nosotros lo vemos en la cuestión del ejercicio de la sexualidad, promovemos, por ejemplo, la protección, el uso del condón y, no es posible que las mujeres que recurren a esto ni a negociar el uso del condón con su pareja y asumen una maternidad obligada”, explicó.
Por su parte, Luz María Reyes Huerta, directora del Movimiento Marea Verde Alta Montañas destacó que la lucha por la legalización del aborto se impulsa pensando en cómo se cambian vidas y como se continúan proyectos, tomando en consideración que el estado de Veracruz ocupa el segundo lugar en embarazo infantil y en adolescentes.
Las razones para exigir este respeto, dijo, son muy variadas, “están los proyectos de mujeres a las que no les viene bien un embarazo por su situación económica, por su situación estudiantil o recursos económicos”.
