Orizaba, Ver.- La fibromialgia es un padecimiento muy doloroso que aqueja principalmente a tres de cada 10 mujeres en edad productiva, dio a conocer la especialista Ita Renaud. Dijo que la enfermedad, por su sintomatología puede confundirse con otras enfermedades y es importante que la diagnostiquen porque es incapacitante. Este día fue designado Día Internacional de la Fibromialgia en homenaje a Florence Nithtingale, quien nació el 12 de mayo de 1820.
Señaló que el dolor es principalmente en los músculos. “hay 18 puntos dolorosos en el cuerpo: cuello, hombros, espalda, atrás de las rodillas, entre otros y necesitamos tener dolor en 11 puntos para que se considere como positivo el diagnóstico de fribromialgia”.
El dolor es profundo y se le clasifica como somático; se le confunde con artritis porque a veces también duelen las articulaciones, pero es diferente la lesión y se presenta con frecuencia.
ANGÉLICA LO PADECE DESDE PEQUEÑA
Angélica, una mujer joven, de apenas 48 años, relata que ella comenzó con mucho dolor de brazos y piernas desde que tenía 6 o 7 años. “No soportaba que me abrazaran porque me ardían los hombros. Me llevaron a hacer análisis y nos dijeron que estaba bien, que no tenía nada”, recuerda.
Su adolescencia y juventud transcurrió con crisis de dolor antes de que le diagnosticaran la enfermedad en el Hospital Médica Sur, pero, aunque le dieron tratamiento no funcionó.
Subrayó que la crisis más fuerte de la enfermedad se presentó en el 2010 cuando falleció su papá a causa de cáncer, dos años después muere su mamá a consecuencia de la misma enfermedad y dos años más tarde, su hermana.
“Todos esos decesos, mi papá, mi mamá, mi hermana fueron mi detonante para que me fuera para abajo con depresión, angustia, incrementaron más mis dolores”, subraya.
80 POR CIENTO DE QUIENES LA PADECEN VIVIERON SITUACIONES TRAUMÁTICAS
La especialista señala que el 80 por ciento de las mujeres que padece esta enfermedad tuvo alguna situación emocional difícil en su infancia y adolescencia. La literatura describe que pudo haber tenido algún tipo de abuso, maltrato, algo que no se habló y eso conlleva a que haya este trastorno que es neuro emocional, es decir, que tiene mucho componente afectivo.
Aunque no hay una cura, sí hay tratamientos específicos para este padecimiento que palian los síntomas, con medicación y trabajo personal del paciente. “Yo considero que sí requiere un tratamiento multidisciplinario porque requiere la atención del psicólogo, a veces del psiquiatra por los desórdenes que conlleva la vida familiar, es decir, que se van agregando factores”, explicó.
Angélica señala que, aunque la enfermedad la padece ella, su familia también la reciente. “Soy mamá, tengo dos hijos y el apoyo de mi esposo, pero ellos se ven afectados porque les duele ver cómo sufría por el dolor”, dice.
A quienes sufren dolores de este tipo las exhortó a que busquen ayuda, porque sí la hay. Señala que desde que llegó a la consulta con la doctora Renaud, quien tiene una Clínica del Dolor, ha observado una mejoría significativa. “Busquen ayuda, no hay cura, pero con el tratamiento sí hay mucha mejoría en la calidad de vida y hay días sin dolor”, concluyó.