Orizaba, Ver.- Personal de Petróleos Mexicanos en coordinación el de Protección Civil del municipio de Nogales, así como Bomberos de las Altas Montañas y otras agrupaciones de auxilio, efectuará esta mañana un simulacro en los ductos ubicados en la comunidad de Balastrera.
A través de un comunicado Protección Civil de Nogales pide a los habitantes de Balastrera o Cecilio Terán, no se asusten, así como tampoco pretende causar alarma entre los automovilistas.
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Y es que de acuerdo con el informe, después de las 11 de la mañana se desplazarían vehículos oficiales con torretas y sirenas encendidas, lo cual podría llamar la atención de los usuarios de la autopista Puebla-Veracruz, ya que el lugar en donde se va a trabajar se ubica a la altura del kilómetro 246+600, a la altura de la caseta de inspección zoosanitaria.
Según Pemex, el simulacro es de nivel IV, con la temática de “ruptura del oleoducto de 300”, ubicado a un costado de la vía de comunicación.
El propósito, es el de estar preparados ante una contingencia real, y aminorar los tiempos de respuesta para evitar daños severos a la población.
Como se recordará, el 5 de junio de 2003 los ductos en mención explotaron ante el golpeteo de piedras de gran tamaño, arrastradas en ese entonces por la crecida del río Chiquito.
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Los tubos de la paraestatal se encontraban expuestos, sin protección alguna, por lo cual las rocas provocaron primero una fuga de combustible y posteriormente el chispazo por el cual se generó el estallido que alcanzó a los comedores ubicados a más de 100 metros de distancia.
Automotores que se encontraban estacionados a la orilla de la autopista quedaron completamente calcinados, y se contabilizaron a un aproximado de 3 mil damnificados por la contingencia.
Un par de menores de edad que resultaron con quemaduras severas, fueron trasladadas vía área a Estado Unidos con apoyo de la fundación para niños quemados Michou y Mau, ya que serían intervenidas quirúrgicamente, a fin de sanar los más posible del tejido dañado.
A 21 años de la tragedia, Pemex vuelve al lugar para realizar un simulacro, ahora con los tubos protegidos por estructuras metálicas, pero con la amenaza del río Chiquito.