Orizaba, Ver.- A casi un año de que la Dirección de Transporte del Estado de Veracruz retirara de circulación los autobuses Gallo, propiedad del Ayuntamiento de Orizaba, el proceso legal para que éstos y también los Búho nuevamente circulen, continúa, dio a conocer la síndica de Orizaba, Michelle Fragoso Martínez.
En entrevista, dijo que el servicio que la población extraña más es el que daban los Búho, pues éstos acercaban a sus hogares o lugares de origen principalmente a trabajadores, que salen de su fuente de empleo cuando ya no circula ninguna línea de pasaje.
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“Se utilizaba muchísimo, ya tenía tiempo y mucha gente hacía uso de él, se extraña, la gente lo necesita; esperemos que esta situación pronto se resuelva, el presidente ha estado todo este tiempo revisando con la parte jurídica viendo por qué no camina. Esperemos que pronto haya una decisión al respecto y se pueda hacer uso de ese transporte”, señaló.
Agregó que la movilidad es parte fundamental para los ciudadanos, por eso lamentó que el servicio de ambos camiones se suspendiera, pero principalmente el servicio del Búho, que comenzaba a dar servicio cuando las líneas de pasaje ya no circulan y terminaban de operar cuando las líneas de transporte público comienzan a funcionar.
“Hay personas que entran a trabajar muy temprano y gastar en un taxi merma mucho su economía y el Búho es un servicio para ayudar a que la gente pueda disponer de su dinero para otra cosa”, dijo.
¿Por qué los camiones "Gallo" y "Búho" no pueden dar servicio en Orizaba?
Los camiones se pudieron recuperar, pero no se pueden utilizar porque todavía continúa el proceso legal; sin embargo, hay ocasiones especiales en las que se les ve circular, pero con una lona que tiene una leyenda.
Sobre esto explicó que se usan cuando se solicita al Municipio el apoyo para traslado, ya sea para los trabajadores del mismo Ayuntamiento, que se capacitan en materia turística o para hacer algún traslado dentro de la ciudad.
Cabe recordar que el autobús Búho, que tenía funcionando ya varios años, recorría la ciudad en un circuito, (Avenida Cri-crí, Poniente 7, Oriente 6), a partir de las 9 de la noche, cuando ya no circulan las demás líneas de transporte público.
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Los autobuses Gallo recorrían durante el día y tarde los lugares turísticos, donde hacía paradas, pues el servicio era primordialmente para los turistas, aunque también hacían uso de él los orizabeños, pagando la cuota y, podían ascender y descender únicamente en las paradas turísticas.
El Búho cobraba una cuota de 5 pesos, mientras que el Gallo era gratuito para los turistas que mostraban el boleto de acceso a alguno de los atractivos de la ciudad que tienen costo como el teleférico, el tobogán de la montaña, el convento de San José, Casavegas; los orizabeños y demás usuarios pagaban 5 pesos.
