Sin fecha para entrar a la nueva normalidad: Enríquez Báez

El vocero del obispado, subrayó que mientras el semáforo se mantenga en color rojo, las celebraciones son privadas y con un mínimo de asistentes

Mayra Figueiras Hernández | El Sol de Orizaba

  · sábado 27 de junio de 2020

Foto: Miguel Castillo | El Sol de Orizaba

Orizaba, Ver.- En las parroquias, rectorías y capillas de la Diócesis de Orizaba, mantienen la misma instrucción que hace algunas semanas estableció el obispo Eduardo Cervantes Merino y los sacerdotes continúan haciendo las Eucaristías de forma privada.

El vocero del obispado, Helkyn Enríquez Báez, subrayó que mientras el semáforo se mantenga en color rojo, esa disposición se mantiene, por lo que las celebraciones son privadas y con un mínimo de asistentes, que son generalmente ministros que asisten al sacerdote durante las mismas.

Indicó que este tema lo trataron el viernes pasado durante una reunión presbiteral que sostuvieron de manera virtual y se ratificó.

Mientras llega el tiempo para incorporarse a la nueva normalidad, en los templos, los sacerdotes dieron la instrucción para que en las bancas se marquen los espacios que podrán ocupar los fieles con el propósito de respetar la sana distancia, además de que se dan a la tarea de desinfectar ya, algunas parroquias.

Foto: Miguel Castillo | El Sol de Orizaba

SÍ HAY VIOLENCIA CONTRA GRUPOS VULNERABLES Y CONFINAMIENTO LOS DETONA

Por otra parte, al referirse a la manifestación que hicieron activistas de Marea Verde, dijo que este es un derecho que toda persona y cualquier grupo u organización puede asumirlo para expresarse especialmente contra una realidad como la de la violencia, que sí existe y que en estado de confinamiento se agrava.

Y no solo a causa de la convivencia durante 24 horas, sino por problemas económicos. “Se empieza a generar en primer lugar, inseguridad, luego, agresividad y de ahí se pasa a la violencia. Sí existen los casos de violencia intrafamiliar”, reiteró.

Foto: Miguel Castillo | El Sol de Orizaba

La hay no solo contra la mujer sino contra los adultos mayores, porque algunas personas se impacientan y los maltratan, lo mismo sucede contra los niños.

El estado de confinamiento si puede la agravar y, mientras unos lo resuelven bien y lo asumen como parte de la vivencia histórica que tenemos como humanidad, hay otras que, por las circunstancias de psicología, de temperamento, las circunstancias económicas, la falta de trabajo, sí caen en la violencia, que en algunos casos tiene ya toques dramáticos, porque se llega a los excesos y los que la sufren son especialmente las personas más vulnerables”.

Por ello consideró que es necesario fortalecer los institutos o las medidas que prevengan la violencia o que buscan erradicarla, pues esto siempre será necesario para el buen desarrollo de la comunidad.