Orizaba, Ver.- Al menos cuatro viviendas fueron reducidas a cenizas y escombros, debido a un probable corto circuito generado por el cableado eléctrico, en la vía pública, el cual era azotado fuertemente por las ráfagas del viento.

Esto ocurrió alrededor de las 2:30 de la mañana, en una vivienda ubicada sobre Norte 6 entre Oriente 15 y 13, de la colonia Centro, en el barrio Aulicaba.

Los primeros informes señalan que las fuertes ráfagas de aire provocaron que el cableado eléctrico friccionara en la dirección antes mencionada, por lo cual un transformador eléctrico supuestamente presentó un fallo y las chispas cayeron en un inmueble en donde al parecer almacenaban desechos reciclables.

Otra hipótesis señala que una lona de gran tamaño habría presuntamente caído sobre los cables chispeantes, y de ahí se generó el fuego hacia la vivienda de una persona, al parecer dedicada a la venta de material reciclable.

Por ello es que las llamas se levantaron de inmediato y se propagaron por el aire alcanzando una altura superior a los 10 metros, provocando la alarma en decenas de vecinos, quienes tuvieron que ser evacuados por elementos de la Policía Municipal y Protección Civil, ante el riesgo existente.

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Y es que tras incendiarse la casa en donde había material pet, otras viviendas al parecer de un patio de vecindad fueron consumidas por el fuego al encontrarse dentro del mismo predio.

Por ello la alarma de los vecinos, y al lugar también llegaron elementos de la Central 119 de Bomberos Orizaba, con varios carros tanques y personal debidamente equipado, los cuales se avocaron de inmediato a lanzar chorros de agua sobre las viviendas siniestradas, para tratar de sofocar el fuego y reducir el riesgo para los demás habitantes.

Personal del Departamento de Agua Potable dio apoyo acarreando líquido con sus vehículos para abastecer a los bomberos, quienes durante varios minutos trabajaron para finalmente controlar el siniestro, atacando desde el lado contrario, es decir ingresaron con la autorización de sus propietarios, por una casa de Norte 8, para llegar rápidamente al siniestro y evitar daños a otros inmuebles.

Durante ese tiempo las calles aledañas estuvieron delimitadas con cinta amarilla para facilitar el apoyo y arribo de los vehículos de rescate, siendo necesario el desvío de la circulación a arterias alternas.

Personal de Alumbrado Público haría una inspección ocular en el lugar de los hechos para ver hasta donde podrían hacer las reparaciones necesarias, a fin de restablecer la energía eléctrica, la cual quedó suspendida en esa zona, aunque eso también fue reportado al personal de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) para que se presentara a tomar conocimiento y diera el apoyo necesario.

Finalmente a las 5 de la mañana la conflagración fue controlada y sofocada totalmente por los rescatistas, quienes se retiraron y la circulación se reabrió.

Algunas personas regresaron a sus hogares, pero otras más se fueron con familiares a casas retiradas.

No hubo víctimas, solo daños materiales.