Orizaba. Ver.- El cadáver del presunto “secuestrado” encontrado la noche del pasado miércoles 24 de febrero, en la colonia Anáhuac, continúa en las instalaciones del Servicio Médico Forense (Semefo), sin ser reclamado.
Es un individuo de complexión media, cabello corto, de entre 1.70 y 1.75 metros, con un tatuaje de una leyenda ilegible en la mano derecha, así como el dedo meñique de la misma extremidad, amputado.
En la mano izquierda, al individuo se le aprecia el tatuaje de una calavera, y serían las señas particulares por las cuales podría ser reconocido, al empezar a descomponerse su organismo.
Y es que a decir de allegados a la investigación, esta persona fue encontrada muerta, no fue abatida en el enfrentamiento que las fuerzas del orden sostuvieron con delincuentes, como lo habían dado a conocer.
En detalles, investigadores conocieron que el enfrentamiento se dio porque los estatales encontraron una casa de seguridad y mataron a uno de los vigilantes, pero el otro cadáver era el de una supuesta víctima a la que tenían privada de su libertad en ese inmueble ubicado en calle Leona Vicario, de la colonia Anáhuac.
Al parecer esta persona ya tenían más de 48 horas sin vida, y hasta el momento nadie se ha presentado a reconocerlo, por lo cual permanece en la morgue, y la investigación permanece abierta para esclarecer si era secuestrado o "levantado" de alguna otra banda delictiva.