Orizaba, Ver.- Desde hace treinta años, los Guardianes del Cerro del Borrego dan mantenimiento al principal sendero de ascenso y descenso de esa montaña, pues en caso de falla del teleférico ésta se convierte en ruta de evacuación para los paseantes, dijo Carlos Altamirano Lima, coordinador del grupo ecológico.
Expresó que los guardianes periódicamente lo chapean y limpian pues es una ruta de evacuación, además, se monitorea para prevenir derrumbes, aunque con las lluvias esto es impredecible.
Indicó que quienes integran el grupo que da el mantenimiento son deportistas y vecinos altruistas que heredaron el amor por la montaña, “a la que respetamos, le damos su manita de gato y reforestamos, porque nacimos al pie del cerro del Borrego”, apuntó.
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Comentó que gracias a gestiones que hicieron ante el gobierno municipal, instalaron alumbrado solar, pasamanos, miradores, y descansos a lo largo de más de un kilómetro, desde las faldas hasta la cima de la montaña.
“Con los visitantes y vacacionistas fomentamos el turismo de aventura, acompañamos a los grupos que gustan visitar las cuevas que existen en el emblemático cerro”, abundó.
Apuntó que en la cima de la montaña cuentan con equipo para combatir incendios forestales, palas, picos, tanques de agua, mangueras y bombas. Los guardianes saben hacer brechas corta fuego en caso de una contingencia en el eco-parque.
El Cerro del Borrego tiene una altura de mil 240 metros sobre el nivel del mar, en la cima tiene un eco-parque con una amplia zona boscosa, veredas, capilla, teleférico y un cañón de la época, testigo de la masacre de soldados mexicanos a manos del Ejército Francés.
