/ lunes 4 de julio de 2022

Perdió su empleo pero sabe hacer salsas; ¿cómo logró el éxito?

El gusto por la cocina de Susana Segovia la hizo emprender su negocio con el cual lleva 4 años realizando salsas, mermeladas y dips caseros

Orizaba, Ver.- De la buena memoria y de las buenas recetas pueden nacer emprendimientos como el de Susana Segovia, quien perdió su empleo pero su entusiasmo y buena memoria le ayudó a recordar lo que su mamá le enseñó desde niña, el amor por la cocina y los productos caseros.

Haciendo referencia a su edad, Susana temía no la pudiesen contratar en algún otro empleo luego de haber quedado sin trabajo, sin embargo, la herencia de su mamá y el gusto por la cocina, la hizo emprender su negocio con el cual lleva 4 años realizando salsas, mermeladas y dips caseros.

Leer más: ¿Ya no harán más pan?, insumos suben de precio y panaderos se limitan

"Gracias a esa herencia es que ahora contamos con 4 años de experiencia elaborando los productos, tomando cursos de embotellamiento y cerrados al vacío de forma casera, pues mis productos no contienen conservadores, todo es natural".

Apoyada por su familia, quienes le apoyaron con su negocio y trabajando de la mano con su prima, empezó a hacer la salsa macha de cacahuate, pero las tecnologías le permitirán tomar cursos gourmet y poco a poco tuvo más productos, siendo hoy día la salsa con mango y habanero la estrella de su emprendimiento.

Dedicada a las ventas en línea, con sus clientes fijos y los potenciales que la busca en diversas expos, sigue enfocando en innovar, teniendo productos de calidad enfocados en la nutrición, "mi familia fueron mis representantes activos y degustadores".

Recuerda que su proceso sin conservadores, por lo que las botellas son lavadas, hervidas y puestas a secar boca abajo y mientas esto pasa, Susana vuelve su cocina, una máquina de producir, haciendo salsas, mermeladas y dips que luego son vaciados a los frascos y posterior al cierre son puestos a hervir nuevamente lo que le da un sellado al vacío.

Cuestionada sobre cómo vivió la pandemia de Covid-19, señala que sus ventas eran por redes sociales y su punto de entrega era seguro "no perdí, hasta ahora sigo ganando".

Dentro su gama de productos se encuentran: queso crema con chipotle y tocino, queso crema con vino tinto y frutos secos, como botana, también las salsas de habanero con piña y mango, la salsa macha de habanero, salsa dulce de chipotle, salsa macha de chile morita, cacahuate y semillas.

Mantequilla de ajo y finas hierbas, pimiento con cebollín, arándanos dulces y capuchino con chocolate, además de las mermeladas de frutos rojos, guayaba con Chía, mango con maracuyá, vino tinto, piña con coco, entre otros productos.

Alza de precios en productos

Aceite, semillas, frutas y verduras subieron su precio, pero a partir de este año, tuvo que elevar 10 pesos su producto final, vendiendo en 60 pesos cada frasco de salsa, mermelada o dip, "el dicho de que nos va bien nos funciona para poder ahorrar un poco para poder invertir como el queso que ocupamos y los productos de calidad que tenemos".

Leer más: ¿La tortilla de maíz engorda? Expertos de la UNAM hablan sobre sus beneficios

Otra de las alzas en precios que vivió fue el envase donde sirve las salsas, pues cada uno subido 2 pesos y su target mensual son de 500. Ha tenido un proyecto impulsado en sus redes sociales dónde invita al reciclado de frascos que tienen su etiqueta, los presentan en alguna de las expos a las que acude y se rellena del producto y se hace un descuento; el proceso de envasado al vacío se hace.

Cabe hacer mención que dentro de su variedad de productos maneja 45 diferentes entre dulces y salados.

Orizaba, Ver.- De la buena memoria y de las buenas recetas pueden nacer emprendimientos como el de Susana Segovia, quien perdió su empleo pero su entusiasmo y buena memoria le ayudó a recordar lo que su mamá le enseñó desde niña, el amor por la cocina y los productos caseros.

Haciendo referencia a su edad, Susana temía no la pudiesen contratar en algún otro empleo luego de haber quedado sin trabajo, sin embargo, la herencia de su mamá y el gusto por la cocina, la hizo emprender su negocio con el cual lleva 4 años realizando salsas, mermeladas y dips caseros.

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"Gracias a esa herencia es que ahora contamos con 4 años de experiencia elaborando los productos, tomando cursos de embotellamiento y cerrados al vacío de forma casera, pues mis productos no contienen conservadores, todo es natural".

Apoyada por su familia, quienes le apoyaron con su negocio y trabajando de la mano con su prima, empezó a hacer la salsa macha de cacahuate, pero las tecnologías le permitirán tomar cursos gourmet y poco a poco tuvo más productos, siendo hoy día la salsa con mango y habanero la estrella de su emprendimiento.

Dedicada a las ventas en línea, con sus clientes fijos y los potenciales que la busca en diversas expos, sigue enfocando en innovar, teniendo productos de calidad enfocados en la nutrición, "mi familia fueron mis representantes activos y degustadores".

Recuerda que su proceso sin conservadores, por lo que las botellas son lavadas, hervidas y puestas a secar boca abajo y mientas esto pasa, Susana vuelve su cocina, una máquina de producir, haciendo salsas, mermeladas y dips que luego son vaciados a los frascos y posterior al cierre son puestos a hervir nuevamente lo que le da un sellado al vacío.

Cuestionada sobre cómo vivió la pandemia de Covid-19, señala que sus ventas eran por redes sociales y su punto de entrega era seguro "no perdí, hasta ahora sigo ganando".

Dentro su gama de productos se encuentran: queso crema con chipotle y tocino, queso crema con vino tinto y frutos secos, como botana, también las salsas de habanero con piña y mango, la salsa macha de habanero, salsa dulce de chipotle, salsa macha de chile morita, cacahuate y semillas.

Mantequilla de ajo y finas hierbas, pimiento con cebollín, arándanos dulces y capuchino con chocolate, además de las mermeladas de frutos rojos, guayaba con Chía, mango con maracuyá, vino tinto, piña con coco, entre otros productos.

Alza de precios en productos

Aceite, semillas, frutas y verduras subieron su precio, pero a partir de este año, tuvo que elevar 10 pesos su producto final, vendiendo en 60 pesos cada frasco de salsa, mermelada o dip, "el dicho de que nos va bien nos funciona para poder ahorrar un poco para poder invertir como el queso que ocupamos y los productos de calidad que tenemos".

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Otra de las alzas en precios que vivió fue el envase donde sirve las salsas, pues cada uno subido 2 pesos y su target mensual son de 500. Ha tenido un proyecto impulsado en sus redes sociales dónde invita al reciclado de frascos que tienen su etiqueta, los presentan en alguna de las expos a las que acude y se rellena del producto y se hace un descuento; el proceso de envasado al vacío se hace.

Cabe hacer mención que dentro de su variedad de productos maneja 45 diferentes entre dulces y salados.

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