Nogales, Ver.- Asociaciones de defensa de caninos en las Altas Montañas, impulsarán la construcción de un monumento en honor al perro callejero “El Guapo”, fiel vigilante de la Laguna de Nogales que murió hoy, pero que recuerdan como un guerrero, ya que pasó por varias situaciones difíciles que pusieron su vida.
Ángel Osorio, impulsor del proyecto, dijo que la mascota querida por vecinos, comerciantes y policías que vigilan la Laguna, merece ser sepultada alrededor del ojo de agua, en recuerdo a los animales sin dueño.
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Recuerda que el can fue atropellado y quemado con aceite en el 2018, su caso se hizo viral en redes sociales.
“El objetivo de la estatua es crear mayor conciencia sobre el trato a esa especie, porque todos los días miles de canes son abandonados en la calle y el resto, aun cuando tienen dueño son expuestos a vejaciones de todo tipo”, agrega.
El rescatista se pronunció a favor de la esterilización masiva de perros callejeros que abundan en comunidades de las Altas Montañas.
¿Quiénes apoyaron al perro después de ser quemado con aceite?
Recuerda que tras sufrir el accidente y salvarse cuando lo quemaron con aceite, ninguna persona quiso hacerse cargo de “El Guapo”, pero la mano amiga de comerciantes de la Laguna surgió para darle sustento.
Un perro callejero es un can sin hogar, no tiene donde cobijarse cuando tiene frío o llueve, es un animalito que come sólo cuando encuentra, que no tiene a nadie que lo acaricie ni cuide si se siente mal. y no solo eso es un perro expuesto a cualquier tipo de maltrato.
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“Todos somos responsables de lo que le sucede a los callejeros. El monumento al Guapo es un recordatorio para que no haya más canes en las calles”, apunta.
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La frase de Gandhi lo resume todo: “Un país, una civilización se puede juzgar por la forma en que trata a sus animales”.
