ORIZABA, Ver.- La población de la zona Centro afronta grave vulnerabilidad social, pues el gobierno del estado hace caso omiso y práctica una política de simulación en materia de seguridad, aseveró Jairo Guarneros Sosa, representante de la Coordinadora de la Sociedad Civil.
Destacó que persiste la inseguridad y los datos más recientes de ejecuciones en otras regiones del estado, donde incluso funcionarias públicas fueron víctimas, así como las que se han registrado en esta región, ofrece una visión distinta a la que tiene el estado y de la que pretende convencer al pueblo.
Resaltó que noviembre ha sido el mes más sangriento en la región de Orizaba, porque en 3 o 4 días, murieron varias personas.
Indicó que “el gobierno hace como que investiga, por ejemplo, el caso del asesinado en Río Blanco, los cuerpos policiacos, la guardia nacional y fuerza civil nada más llegan acordonar sin encontrar a los culpables".
Las corporaciones deben brindar seguridad, deben evitar los crímenes y que la población sea blanco de ataques, como sucede a menudo
Agregó que no se gana nada con ocultar lo que, en realidad pasa; ellos piensan que si tu no lo dices es como si desapareciera. "Me parece que a lo mejor hacen investigación, pero sin resultados; por eso existe inseguridad, por alguna debilidad del estado y al final lo afectados somos la sociedad civil”, resaltó.
Igual que como en la pandemia, en materia de violencia e inseguridad ya se alcanzó el pico. “La percepción es que hay pugna de grupos delincuenciales y cuando ello existe, corre mucha sangre; es ahí donde el estado debe de poner atención”, aseveró.
Finalmente, señaló que la mayor responsabilidad del estado es investigar y buscar acciones de prevención luego de las señales de violencia que se viven.