La crisis del café ha tocado fondo y con ello se pierden las esperanzas de caficultores que durante años han luchado en busca de respaldo institucional y precios justos, dijo el campesino Esteban Gómez García.
A sus 81 años de edad, el productor de café, originario de Teocelo, ha dedicado la mayor parte de su vida al cultivo, cosecha y venta del aromático. Recuerda con tristeza que "la época de las vacas gordas se quedó allá, hace más de 20 años, pues ahora no nos pagan más de 6 pesos por el kilo de (café) cereza".
Con decisión, el campesino participó ayer en la marcha que realizaron caficultores de la región para demandar también el pago de 5 mil pesos que, señalan, el gobierno federal les prometió a cada uno de ellos desde el inicio de la actual administración. El recorrido inició en la glorieta de Coatepec y culminó en la plaza Lerdo de esta capital.
Con sus manos sucias por la tierra y llenas de callos por las labores del campo, don Esteban narra que durante los últimos 20 años ha sido muy difícil ganarse la vida con la caficultura, pues mientras que por un lado les pega la falta de apoyo y los bajos precios, por el otro la plaga de la roya no deja de dañar las plantaciones.
"Pero no sólo el café se encuentra descuidado, el campo se pierde en lo general, porque ahora los jóvenes no lo quieren trabajar y quedamos unos cuantos, todos mayores, que hacemos la lucha por trabajar y sostener lo poco que se tiene", sostuvo.
Para don Esteban es una tristeza ver las hectáreas de café abandonadas, lotificadas o de plano suplantadas por construcciones, lo que deja en claro la falta de apoyo para el sector cafetalero.
Durante la marcha los campesinos dijeron que de los más de 15 mil caficultores que hay debidamente registrados en el estado, menos de la mitad ha recibido el recurso de parte de la Federación. Los productores llegaron de comunidades como Teocelo, Cosautlán, Emiliano Zapata, Xico y Coatepec.
