Orizaba, Ver.- Así como los 793 jóvenes que madrugaron para llegar hasta la Facultad de Ciencias Químicas, ubicada en sur 57 y oriente 6, para formar y presentar el examen de admisión a alguna de las facultades de la Universidad Veracruzana (UV), los padres de familia, amigos e incluso hermanos mayores, llegaron a acompañarlos, pero al no poder ingresar a las instalaciones, hicieron de sur 57, Ojo de Agua y cafeterías de la zona, su "sala de espera".
Muchos de estos, desde las 6 de la mañana llegaron a formar, algunos con mochilas al hombro y otras más con una bolsa de mano y una botella de agua, fue como formaron, pero la realidad es que los padres de familia, fueron los que resguardaron más pertenencias de los aspirantes, puesto que únicamente se les permitió el acceso con lápiz, goma, sacapuntas, calculadora de múltiples funciones, así como el documento de inscripción para el examen.
Poco después de las 7:45 que los jóvenes aspirantes ingresaban a las instalaciones de la facultad, los padres de familia fueron notificados por personal de la Universidad Veracruzana que podían esperar a sus hijos sin instruir el paso vehicular, para evitar accidentes, por lo cual se les dieron recomendaciones.
Lo anterior fue que permanecieran en la banqueta, o bien se les instruyó como poder llegar a Ojo de Agua, donde el camino se toparon una cafetería, siendo estos sitios un lugar de espera e incluso desayuno para aquellos desde primera hora de este domingo 26 de mayo, llegaron a la FCQ.
En Ojo de Agua, los puestos de comida, como memelas de frijol, tacos de bistec, longaniza y de flor de calabaza con champiñones y chicharrón, lucieron llenos, no obstante, también ya había gente en este espacio, quienes aprovechan la mañana para pasar un rato en familia y nadar en la bella laguna.
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Otro grupo de padres de familia optó por quedarse cerca, pues a que sus hijos no podrán salir, hasta que concluya el examen que contiene alrededor de 120 cuestiones, los padres de familia, buscando la sombra bajo un árbol o una pared, esperaron pacientemente.
Ya sea leyendo un libro, revisando el celular, tomando café o yogur e incluso llenado algunos documentos quizá laborales, papás y mamás esperaron a sus hijos, y aunque su mente estaba ocupada en las actividades, seguramente su corazón y pensamiento deseaba a sus hijos el mayor de los éxitos.
La sur 57 lució con algunos grupos de padres de familia, quienes yacían dentro de sus vehículos, pues algunos encontraron lugar en los cuatro lugares de estacionamiento que tiene una agencia de autos, que por ser día domingo, no laboró.
Han transcurrido dos horas y los padres de familia, amigos e incluso hermanos o primos, esperan pacientemente las 3 horas límites de examen que inició a las 9:00 de la mañana.
