Orizaba, Ver.- Por primera vez, jóvenes de la Parroquia de nuestra Señora de Guadalupe, de Xometla, comunidad de La Perla llevaron el fuego guadalupano a su comunidad. Encendieron la antorcha en el Santuario Diocesano, La Concordia, y en relevos recorrieron el camino desde ese templo hasta su municipio de origen.
Al menos 130 jóvenes, entre hombres y mujeres, respondieron a la convocatoria que hizo la Pastoral Juvenil de ese templo y con todo el ánimo propio de su edad se alistaron para correr hasta su municipio.
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Antes de salir, el sacerdote Miguel Maldonado, vicario del santuario guadalupano les dijo: “jóvenes, hoy que llevan este fuego a su parroquia, los invito a que lleven también a su casa: esperanza, alegría, gozo; a que, si han tenido algún problema o dificultad, se lo entreguen a María Santísima, de tal manera que no regresen tristes, sino contentos porque llevan el fuego de la esperanza, de la fe; llevan la alegría de la vida en sus manos”.
Después de tres años de pandemia y tras haber superado la etapa crítica de la misma, las expresiones de fe nuevamente se manifiestan y llegan a La Concordia numerosas peregrinaciones, desde los diferentes municipios.
Todas son significativas porque los fieles llegan con el corazón dispuesto a entregar a la Virgen Morena sus preocupaciones y penas, pero también sus alegrías, ilusiones y proyectos. “Saben que nuestra Madre los escucha y que intercede por ellos, que no los deja solos”, menciona el párroco del templo, padre Juan Carlos Villa Cañedo.
Así, día a día llegan familias, empleados de comercios, empresas, estudiantes de escuelas con formación católica, peregrinos que van de regreso a su lugar de origen, indígenas, todos con la misma intención: agradecer y pedir la intercesión y protección de la Virgen de Guadalupe.
Las procesiones son abanderadas por elementos de la Policía Vial durante todo el recorrido, dentro de la ciudad, y hasta ahora ninguna de ellas recurre al uso de pirotecnia.
Este año, la fiesta de la Virgen de Guadalupe concluirá hasta el 15 de diciembre, cuando lleguen las últimas peregrinaciones programadas con anticipación.
