Veracruz, Ver.- Con el concepto de “fandango negro” la tlacotalpeña Nandy Luna Ramírez rescata las raíces indígenas y africanas para preservar el legado familiar del son jarocho.
Nieta de Elena de la Luz Ramírez Aguirre, mejor conocida como “Mamá Elena”, quien es preservadora del zapateado y el son jarocho, Nandy relata que nació en el núcleo de una familia afromestiza de bailadores de fandango por lo que no hubo necesidad de tomar clases, prácticamente nació bailando.
- Te puede interesar: Pinacoteca Diego Rivera, recinto con siglos de historia
¿Cómo fue su formación en la danza?
“Nací bailando, aprende uno en el fandango, es una fiesta, yo nunca tomé una clase donde me dijeran aquí zapateas así, un piecito o el otro, con mi abuela, mis tíos, mis padres, bailando en las fiestas”, dijo.
Comenta que desde pequeña se interesó en investigar acerca de las raíces indígenas y africanas como parte del mestizaje, todo desde dentro de su familia.
“Siempre sentí que algo era diferente en mí, en México tras esta idea del mestizaje fueron como tapando mucho nuestras raíces tanto la indígena como la africana, haciéndolas a un lado y diciéndonos a todos que somos mexicanos, está muy bien pero siento que los mexicanos tenemos raíces muy fuertes, muy profundas y en algún punto de mi vida dije yo tengo que explorar esta parte”, relata.
Tras esta investigación decidió crear su proyecto llamado “fandango negro” para que sea el conducto de ayudar a encontrar los símbolos de las culturan que habitan dentro de ellos.
¿Ya nos sigues en Google News Showcase? Es gratis
“La idea del fandango negro es hacer un conglomerado de las danzas afromexicanas y darlas a conocer, es una diáspora, me invente el termino porque fandango es la fiesta, la reunión, esa palabra se utiliza en México de esta forma y lo pensé de esta forma y utilice la palabra negro porque se me hizo interesante la combinación para que se gestara”, expone.
Menciona que este proyecto cultural nació en el 2021 con el Sistema de Apoyos a la Cultura y la Creación conocido anteriormente como Fonca a través de una beca como bailarina de danza folclórica.
Lee más: Ballet de Bulgaria te enseña técnica en danza rusa; ¿cómo participar?
La coreógrafa profesional, destaca que ha llevado este término musical a estados como Guerrero, Oaxaca donde ha tenido oportunidad de reunirse con familias muy parecidas a la de ella, portadoras de tradición.
¿Cómo se llama la segunda parte de su proyecto?
“Estoy haciendo la segunda parte del proyecto que se llama Diáspora, va con el mismo apoyo y me estoy enfocando en Veracruz, he estado en diversos lugares de aquí, investigando y compartiendo con otras comunidades afrodescendientes, porque mi idea es intercambiar lo que yo voy investigando, voy procesando y lo voy compartiendo, es un proyecto de ida y vuelta”, agrega.
Nandy encaminó sus estudios a la profesionalización de la danza y actualmente es coreógrafa.
“Estuve en Barcelona, España estudiando la Licenciatura en Coreografía y técnicas de interpretación de la danza, digamos que vengo de esta parte tradicional del pueblo y me profesionalicé en lo que es la danza”, señala.
Insiste en que la creación del fandango negro es toda la travesía que ha vivido a lo largo de sus 34 años, siendo la danza el lenguaje principal.
Actualmente Nandy imparte la educación artística con talleres de danza en el Instituto Superior de Artes Escénicas de Xalapa y es una de las expositoras participantes en el Afrocaribeño 2023 que se desarrolla del 2 al 8 de octubre.
Nota publicada en Diario de Xalapa